Un discurso como el analítico tiende hacia el sentido. Es claro que de sentido sólo puedo ofrecer a cada quien lo que está dispuesto a absorber; lo cual tiene su límite, marcado por el sentido en que cada quien vive. (Lacan, J., El Seminario, libro 20, Aún (1972-1973), Paidós, Buenos Aires, 2010, p.96)
Selección: José Antonio Rodríguez
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